Los descubrimientos hechos hasta ahora han desvelado que la realidad en la que vivimos es un auténtico "País de las Maravillas", donde ocurren y pueden ocurrir todo tipo de cosas extrañas, aunque no todas son buenas; algunas, de hecho, son terribles; después de todo, Alicia también pasó miedo cuando estuvo en el País de las Maravillas, cuyos habitantes parecían estar todos locos; y en ese aspecto puede que nuestro mundo no se diferencie mucho.Seguramente hay más "realidades" en el mundo que las que hasta ahora se han descubierto. Pero las maravillas que ya se conocen hacen que parezca apropiado comparar el Universo y la Tierra, con todas las cosas bellas que contienen, a un hermoso palacio.Sin embargo, si el ingrediente fundamental con el que está construido, es solo lo que llamamos "información", algo en apariencia tan frágil y maleable, parece un palacio que se puede desmoronar con mucha facilidad, como si estuviera hecho de escarcha. La escarcha es hermosa, limpia, blanca y resplandeciente, y cuando la luz la besa responde devolviendo bonitos destellos de colores; pero es tan evanescente que se deshace si apenas la tocamos. Pero muchas veces las apariencias engañan, y puede que en la aparente fragilidad del ingrediente fundamental de La Realidad, es donde resida su verdadero poder. Para comprender por qué es así, deberíamos hacer un pequeño recorrido por las estancias del Palacio que ya han sido parcialmente exploradas. Una visita al "Palacio de Escarcha" puede resultar muy interesante, y también muy provechosa.
