Este libro es un ensayo filosófico sobre la gravitación, con fenómenos que apoyan las afirmaciones del autor. El estudio pretende ofrecer a los científicos una investigación alternativa: La gravitación es repulsiva, no atrayente. En lugar de una fuerza de atracción, la gravedad es un empuje acelerado. Algunos creen que la gravedad no está asociada a la expansión del Universo; su opinión es que la expansión del espacio-tiempo no es posible debido a las magnitudes de los efectos; "la gravedad es mucho más fuerte que la expansión, y esta expansión contribuye a escalas que importan poco"; lo cual es correcto, pero cuando se considera el impacto de ampliación de la expansión primaria sobre la materia, las magnitudes muestran las escalas gravitacionales. En consecuencia, la expansión del espacio-tiempo es insignificante en comparación con el ensanchamiento de la materia del objeto masivo. El peso de la gravedad es por inercia; es un empuje. No es una fuerza de atracción. La expansión universal se produce no sólo en las galaxias lejanas sino en todo el espacio-tiempo. Esta propuesta gravitacional se basa en esta hipótesis, conduce a la mejor comprensión del espacio-tiempo curvo de la relatividad general, y representa adecuadamente todos los fenómenos gravitacionales conocidos. Así, nuestro peso es la inercia causada por el empuje hacia arriba de la superficie de la Tierra. Los físicos han postulado la existencia de una energía oscura aún no confirmada, que aparece como una constante cosmológica en los modelos gravitatorios, como forma de explicar esta expansión acelerada. Si esta energía oscura provoca la expansión del espacio-tiempo, produce la gravedad en lugar de contrarrestarla. Por tanto, la gravedad procede de la expansión del Universo. Nos centramos en los fenómenos más conocidos que, por su comportamiento y efecto, no contradicen esta propuesta gravitatoria; entre ellos están 1. El peso. 2. El efecto de la curvatura del espacio-tiempo. 3. El comportamiento del espacio-tiempo siendo fluido. 4. El empuje del viento solar a la cola de los cometas. 5. En los agujeros negros, no es que la luz sin masa sea atraída sino que es atrapada. 6. El efecto gravitatorio en las mareas. Por lo tanto, es fácil comprender que el espacio-tiempo es un fluido empujado no sólo por el efecto gravitatorio de los objetos estelares, sino también por su movimiento. El ejemplo más clásico es la precesión del perihelio de la órbita de los planetas, como confirma la relatividad de Einstein.
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